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Emibel.
Y el verbo empatizó con la literatura "Y la literatura parió versos Y los versos hablaban de pasión Y la pasión cegó la mirada Y la mirada quedó ausente Y la ausencia habitó..."
Te confundes cuando dices que hay algo más que amistad, lo siento. Pero cometes el error de precipitarte sacando conclusiones, lo intuyo. Tan malo es llegar tarde, como llegar antes de hora, aprender a llegar en el momento preciso.
Te equivocas, cuando te ríes dejando entre tus dientes palabras equivocadas, conclusiones no maduradas. ¡Si, si! Ahora tú sonríe, pero no tardaras en darte cuenta del error, de verme como un Cesar perdonándote el patinazo que habéis pegado.
Ambos seremos clementes con vosotras y os exoneráremos de los males cometidos, del perjurio de vuestros pensamientos dictados, infantiles y vivarachos. Te confundes y se confunde, pero nos alegramos de vuestros errores porque así, somos conscientes de que crecéis, maduráis y fantaseáis.
Gracias por lo bien que nos lo hacéis pasar con vuestras descabelladas ideas. Pero nosotros no somos maquinas de enjuiciar. Solo somos eso, pequeñísimos peldaños que servimos para que vosotras vayáis un poco más lejos, un poco más alto de donde nosotros llegamos.
Nunca hablo de mi interior, cuando sé que hay algún oído cerca escuchando. Nunca vendo la piel del oso antes de matarlo, no me precipito, no por correr, llego antes.
El texto, queridas es para vosotras, cuidado cuando lo leáis, no os estemos observando y nos riamos, viendo como se os cayo vuestro castillo de naipes. La contestación a vuestras preguntas es: “No, no y no”
¿Qué parte del NO, no habéis entendido?
Bienvenidas al genial mundo de vuestros errores. ¡Pasad y sentíos cómodas!
Los problemas existen y existirán siempre, pero tengo la esperanza que lo único eterno, somos nosotros, ellos desaparecerán por puñeteros. No soy de los que finge no tener problemas, los tengo aparcados en mi casa por todas esquinas. Les miro y los reconozco, pero no pierdo la alegría, no me avinagro con ellos.
Mis problemas se solventan, como cualquier día nublado desaparece, dejando un sol, de igual forma se van. Ahora me renuevo y reinvento a mí mismo, dejando atrás todos esos equipajes pesados, todas esas caras conocidas, me vuelvo hipócritamente senil. ¡Qué gran actor se va a perder el teatro conmigo!
En medio de esta mudanza emocional, que me va a durar lo mismo que el agua en una cesta, salgo fortalecido, enriquecido, guiándome por mi propio instinto.
Cansado de esperarte, cansado de expectativas, de promesas incumplidas, de falta de trabajo, sin un amor correspondido. Sin la invitación de los amigos, sin ser importante para nadie, imprescindible para nada. La vida te produce presión anal, la suerte acostándose desaforada con tu vecino, (Gimiendo la becerra para que la oigas) la tía oportunidad en el ático. Tu cenando con el rechazo y el tío hastió. ¿Soñando que mereces algo mejor, algo más? La factura de la luz sin pagar, la vida hecha trillones de facturas, la paz se suicido en el perchero, la armonía sufre dependencia y la ira tiene contigo manía persecutoria.
No grites, no llores, no te lamentes, todo lo anterior no servía, como los castillos de cubos de madera, dale una patada. ¡Tira todo a tomar por el culo! Esa es la gran oportunidad, te tienes a ti mismo, esa es la oportunidad que renta, la que mayor interés te dará, la amante que nunca te abandonara y la que no te sacara la pasta.
Ya lo dijo el gran Forrest Gump, “la vida es una caja de bombones, nunca sabes cuál te va a tocar” La vida está hecha de millones de momentos jodidisimos, nunca sabrás cuál de ellos te va a tocar. Puteos vividos de mil maneras diferentes, sobrevivimos día a día. Pero no hay momentos muy plenos, la devolución de hacienda. Día a día tenemos el poder, el gozo, regocijo en el flamante sueño de hacer realidad, todos nuestros sueños.
Osease dicho de otra manera. ¡A cascarla con todo, quien invento esta crisis, que con su pan se la coma!
Me acabo de levantar, en este invierno frio, porque lo gélido amo, me mantiene acalorado por dentro. Aún la gota de sudor descendiendo por mi espalda, me gusta, me agrada. Miro al exterior, como los arboles se mecen, por el viento furioso de esta tierra. Como mi pensamiento conteniendo todo un mundo, que no te digo.
Esa fotografía que tengo, doblada en mi cartera, esa camisa azul cielo de cuello blanco. Ese olor que no he olido, intuyo primaveral. Ese cuerpo, tu susurro pidiéndome tiempo, esa voz que debajo de la ducha oigo, metálica en el recuerdo.
Hoy el sol brilla impotente en su labor de darme calor. Respiro caminando por el pasillo hacia mi habitación, que bien podría, ser la tuya. Imaginándote sudada entre las sabanas, adormilada, soportando mi mirada lasciva, ávida de conquistar tu torre, tu castillo. Raptarte para ser prisionera en la cárcel de mi corazón. Encadenándote siempre a mis fuertes brazos, mientras exploro tu hacienda salvaje.
Seco mi cuerpo mientras pienso en todo lo que no te digo. Me visto sufriendo el silencio, de lo no dicho. Desciendo las escaleras volviendo a la cordura de mis pensamientos. Guardo silencio, porque no debo. Voy desayunando todo aquello que nunca digo. ¿Si te quiero?...
Juegan en la soledad de la juguetería Cuentan cuentos inconfesables Bailan al son de la caja de música Volubles, móviles.
Elegidas al azar Bajarán de la estantería A otra morada irán, solas, tristes Lágrimas rodarán por sus caras blanquecinas Mientras sus corazones bombean... Volubles, móviles, latidos de porcelana.
Siento todo lo que siento. Siento paz en mi cuerpo, compases de un estado ectoplasmatico que no vivo por ti, ni por nadie. Vivo para mi, es un equipaje personal lujoso en experiencias bellas y tristes, alegres y concretas. Mi barco ha varado en la playa de la espera, un destino conocido antes de hoy. Un viejo lugar donde habita la paciencia.
Siento el viento soplado sobre mi viejo velero, escucho el chirriar de las viejas maderas. Mi timón que no gira en busca de ninguna dirección, empujándome hacia mares de incertidumbres. Seguro de tener la tenacidad suficiente para varar en una playa no lejana a este destino. Cuando veo el color del mar desde la borda, intuyo cual será el destino final.
Hoy siento el viento por ti y para ti, abrazo tu soledad, esa soledad compartida, porque me siento a tu lado. Lleno tu espíritu de besos y estoy junto a ti. Ahora te sientas aquí, yo me acurruco a tu lado, pese a que me dices ese “no” pidiéndome perdón. Cada viaje es diferente, nunca es igual, según nos sentemos en la borda a observar el desplazamiento de nuestra nave. Pueden parecer iguales, idénticos, pero ningún viaje es igual. Esperando que me aleje de ti, alejándome del comienzo de la tormenta de tus lágrimas. Lejos de tu tristeza contagiosa, de tu individualidades. No vuelvas a decirme "no", porque ya estoy abrazado a ti, gritando a tu soledad para que se aparte de ti.
Ese dolor que te hunde y atormenta, taladrando el corazón, intentándome decir adiós, no te vayas caminando. Rezando porque todo vuelva a ser como antes, a dormir entre tus sabanas de mar, de algas y sirenas jugando en tus estados oníricos. Veo como tus velas se esfuerzan y se abren esperando un viento que empuje tu velero lejos de este paraíso apagado. Veo todas tus ilusiones amontonadas en la cubierta, esperando una brisa favorable que te lleve lejos, de esta playa.
Enciendo el fuego, muriéndome al ver cómo te erosionas al levar anclas, sin desplazarte, sin velas empujadas por el viento. Espera en esta playa de soledad, espera con paciencia, el viaje empieza de comenzar, ahora descansa. Llegaran tormentas duras, lluvia y tempestad, noches aciagas y día de un sol ardiente. Grita ahora por el descanso y la libertad. El viaje comenzara y tienes que estar preparada.
Duerme junto a este mar, junto a esta playa, túmbate en esta arena a descansar, no pidas ahora caminar. ¿Quién comprende los versos de la mar? ¿Quién comprende los vientos? Comprendo las tierras y los valles, las tormentas de verano y los caballos en libertad. Comprendo tu dolor aunque no lo vea, comprendo tu ansiedad por volar lejos de este pesar. Tu voz, esa voz ahogada entre lazos que tiran.
Escucha los delfines en alta mar bailando bajo la luna esta noche, escucha la vida rebosando en los vasos de nuestros días. Observa ahora nuestros barcos serenos, encallados cerca del rocoso de la costa.
Duerme, solo duerme, cuando la brisa arrecie te acompañare para levar el ancla, podrás así quedar libre de este dolor, libre de pesares y tristezas… Duerme, ahora en este fuego encendido para aliviar tu espíritu. Respira el olor de las flores que adornan los cabellos de las sirenas.
Llegaran días de más viajes, de más playas y bordas…
Eres el faro traidor, amartelas los barcos hacia las rocas con tus destellos. Susurras silencios entre las nubes, silencios que arrebatando; matas la felicidad, las caricias, sueños y alegrías de los marineros. Produciendo tropeles de desgracias. Eres inconclusa, estas a medias, adivinándose en ti un cansancio por tus agravios destellados de escarpelicos ojos ladinos de falsos sentimientos. Espero que pagues con la sangre de las venas de tu felicidad. Tormentas amenizaran tus días arruinando tus cosechas. Porque eres esqueleto de un vientre yermo, de una carne fría, de una vida que no es vida. No decidas venir a desnudarte porque no soy fiel ni en el primer beso, te condeno a sufrir ansias de volar en busca de otros que llenen tu absurda existencia con una caricia.
Deseo que tú esencia putrefacta de ego se agote en una lágrima evaporada. Pétrea para la vergüenza de tu casta. Danzaran ante tu afligida estatua todas aquellas que sufrieron tu eclipse con pretensiones indecibles. Que celebren ahora el umbral de tu decadencia, en esta hora. Que las olas salten estampándose contra las rocas y salpiquen tus paredes erosionadas, con la blancura espumosa te erosione con un acido hasta que te desmorones.
Bienvenida la hora de la justicia hasta la costa de tu infame osadía, de la laboriosa maldad cobrándose sus mercancías. Que leven los navíos dañados por tu luz de silencios.
Nuestros pasos vuelven inexorablemente a cruzarse en el camino, llego una fragancia entre los verdores de las praderas verdes, advirtiendo tu llegada, bajo el brillo de un sol más nuevo, prístino y brillante. Necesario brillar así, para iluminar el acontecimiento. Fue inventado para ese día, esos rayos esa calidez en el tacto. Tus llantos amargos del pasado habían cesado, tu lamento llego a su fin. En mis brazos, fue en ellos donde comenzaron a escribirse tus primeros días de vida, tus primeras risas y primeros logros que celebrabas emocionado.
Recuerdo cuando tus pupilas grises asustadas miraban el pardo de las mías, buscando respuestas a preguntas que no habían sido formuladas. Tu pelo antaño negro como Bagual el potro del abuelo, negro como tu futuro próximo. Mascullas algo que no comprendo. Sonrió dulce ante ti, sin dejar de ser un hombre y el niño que llevo dentro.
_¿Vuelves a hablarme?- pregunto tragándome le emoción, ahogándome en mi silencio que surca mi espalda como espada de Damocles justa y envenenada. Susurras la lengua materna, la lengua de la tierra mezclada con un perfecto francés. Susurras asustada escribiendo en mis brazos la apertura de tu mortaja.
Hiero, hiero…
Tus pupilas grises nerviosas me llaman, acostado a tu lado y el cielo se torna oscuro, las primeras gotas anuncian arcangélicas la llegada de la estación de tormentas en la época estival. Serpentean rayos en el cielo.
_No tengas miedo.- susurro mientras tú, sonríes.
El sol s más bello que jamás vi, se fue alumbrando tu entierro, el mismo que hoy no veo. Cuando lleguen las primeras tormentas podre mirar al cielo, expirare mi dolor bajo las lluvias del estío, susurrare “no tengas miedo”.
*A mi abuela la mujer más importante de mi vida, sin corrección ninguna. Mis primeras letras me las enseño ella. A todas las abuelas del mundo porque a ella, le hubiese gustado que también lo dedicase a ellas.
Cansado de toxicidad de escritos y artificios de tu ego, que enarbola la bandera de la creatividad, la belleza de ecos trasnochados de un pasado poco más glorioso que su presente. Harto de sus taimadas ideas por conseguir un minuto más en el escaparte de la vida.
Agotado de su música y requiebros de lamentos, de las curvaturas de sus cejas sorprendidas. Sus pausas inocentes, sus ofensas hechas palabras cargadas de verdades. Hastiado de sus escritos pluscuamperfectos, aplaudidos y laureados, hastiado de su forma de absorber información, harto de destripar informaciones y verdades sangrantes.
Lees ¿Me lees? Por favor ayúdame a salir de su cabeza, ayúdame a ser libre, ayuda por favor. Soy la creación de este salvaje, de este devorador de ideas y fantasías. Solo soy su nueva idea por ahora, aun soy un proceso pensante. Salvarme, pronto o seré eterno, estampado en un trozo de papel, en la página de un blog.
No quiero existir de esta manera. Quiero ser yo mismo y libre, con identidad propia, sin cuerpo vivir mas allá de la cuadricula de una hoja de papel y de este blog. No deseo vivir, ni morir, tampoco equivocarme. No quiero ser eterno.
Llamarle por teléfono, hablarle me está pensando, suenas las teclas de su ordenador, me esta inventando, frunce sus cejas y aprieta sus labios. Sostiene el mentón en su mano. Vuelven a sonar las teclas del ordenador. ¡Me está haciendo eterno! Socorro siento como se crea mi cuerpo, mi alma mi eternidad, como me envuelve le envuelve a él la creatividad, las musas de las letras. ¡Que alguien pare las teclas de su ordenador!
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